Ya es oficial. Tras casi 2 años de diferencia entre la presentación del Xiaomi Mi4 y este, ya lo tenemos entre nosotros. Hugo Barra nos creó un hype increíble ya que fue colgando fotografías realizadas con el Xiaomi Mi5 y tenían muy buena pinta.

El Xiaomi Mi5 estuvo presente en el Mobile World Congress de 2016: la presentación se hizo durante la semana de celebración pero tuvo lugar en las afueras de la Fira. Tras esto, al no tener stand propio, Xiaomi tuvo que colocarse en el de Qualcomm para que todos probasen esta genialidad.

Xiaomi Mi5, ¿es lo que esperábamos?

Empezamos por el cuerpo del terminal dónde Xiaomi ha realizado una obra magnifica con solo un peso de 129 gramos. Mantiene un poco la estética del Xiaomi Mi Note en la parte trasera, siendo los laterales curvos para que se adapte fácilmente a la mano. Además, han mejorado los materiales de construcción con unos marcos de metal; la zona de atrás de cristal 3D, mientras que en la versión ‘pro’ será de cerámica.

La pantalla LCD de 5.15 pulgadas (algunos esperábamos un panel más grande) con resolución FullHD que reproduce los colores correctamente, por lo que no echaremos de menos la resolución 2K. No pudimos probar el móvil a luz ambiente por lo que no sabemos cómo se comportará, sin embargo Xiaomi ha implementado la tecnología Sunlight Display, que consiste en iluminar las zonas oscuras cuando incide directamente la luz del sol al Xiaomi Mi5.

No tenemos botones en pantalla por lo que permite disfrutar del 100% del panel. Estos están situados, como es normal, en la parte inferior del dispositivo, siendo sustituido el botón home por un sensor de huellas que promete funcionar con rapidez —no pudimos probarlo por cuestiones obvias de seguridad—.

Muy bonito por fuera, pero un teléfono de gama alta tiene que existir un equilibrio entre el hardware y software. Eso es lo que pasa con el Xiaomi Mi5: monta un Qualcomm Snapdragon 820 a 1.8 GHz con 3 o 4 GB de RAM (dependiendo de la versión que escojamos) que está a la altura de los más grandes. La capacidad de almacenamiento es de 32, 64 y 128 GB sin posibilidad de ampliarlo mediante MicroSD.

El Xiaomi Mi5 cuenta con 3000 miliamperios de batería, que junto al gran rendimiento del Qualcomm Snapdragon 820, debe de dar unos resultados excelentes, aunque en esto nos meteremos de lleno cuando tengamos una unidad para su correspondiente análisis. En el apartado de conectividad, incorpora una ranura para USB Type-C y estrena tecnología para poder pagar con el móvil; es decir, incorpora, por fín, chip NFC.

La cámara ha sido otras de las novedades de este dispositivo, porque tenemos un sensor Sony IMX298 que cumple con creces a esperas de poder probarla en distintos ambientes. Pero la novedad no es eso, sino que Xiaomi ha dotado al Mi5 de un estabilizador óptico de cuatro ejes, que como podemos ver en el video a continuación trabaja notablemente bien.

MIUI recibe su esperada actualización a Android 6.0 Marshmallow con la presentación de Xiaomi Mi5. No han cambiado la interfaz mucho: lo único, como detalle propio de esta versión de Android, es que viene con Doze incorporado, que mejora, en gran medida, el consumo de batería.

Como podemos ver, estamos a un terminal que cumple con creces lo que promete. El precio de este terminal es muy llamativa, ya que tiene un precio oficial que varía entre los 276-373 euros. Sabemos que no será el precio final ya que las tiendas de importación siempre meten en el precio los correspondientes costes extra de importación, pero estamos ante un terminal de la gama pro con un precio casi 300 euros inferior en comparación con el resto.

¿Qué os parece el Xiaomi Mi5? ¿Está a la altura de los más grandes?