Hay muchas cosas que mirar cuando te compras un nuevo smartphone, la cantidad de almacenamiento, la resolución de la pantalla, la cámara o el procesador. Pero las cosas han cambiado mucho en los últimos años. Seguro que ahora no te planteas la pregunta de si el smartphone que te gusta tiene Wi-Fi o si su pantalla es táctil. Esto es algo que poco a poco ha ido llegando al mercado, y todos los smartphones actuales cuentan con ello, pero hace años la cosa no era así.
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Si alguna vez te has preguntado cuál fue el primer móvil con cámara o el primero en montar una pantalla táctil, hoy respondemos algunas de tus dudas. Puede que resulte fácil, pero encontrar información sobre los primeros smartphones es realmente complicado, los que hoy te mostramos son los primeros según todo lo que hemos podido indagar en la red.
En estos momentos tener Wi-Fi es algo muy común y nunca te platerías la compra de un smartphone sin esta conexión. Pues bien, esto hace unos años es algo que muchos mirábamos muy detenidamente a la hora de comprar un teléfono móvil. Incluso con la estandarización de las pantallas táctiles, había muchos smartphones sin dicha conectividad.
El primero en incluir Wi-Fi fue un teléfono NEC, concretamente el modelo N900iL. Este dispositivo se podía conectar a una red Wi-Fi para hacer llamadas IP y por supuesto para conectarse a internet y navegar en su pantalla a color. Fue comercializado en 2004 y su precio era bastante elevado.
Ahora seguro que tampoco te planteas la compra de un smartphone sin cámara, pero los teléfonos antiguos no contaban con la posibilidad de hacer fotos. El primero llegó en el año 2000 de la mano de Sharp. Se trata del S-JSH04 un dispositivo muy moderno para la época. Solo se comercializó en Japón y hubo que esperar dos años más para que la misma compañía nos dejará en Europa el primer móvil con cámara, el cual tuvo un éxito bastante grande.
Llegamos hasta uno de los más interesantes. Aunque nos guste decir que el primer smartphone vino de la mano de Apple, estamos muy equivocados. El primer móvil con una pantalla táctil fue el IMB Simon. Llegó en 1992 y nos permitía dibujar sobre la pantalla y marcar evento en un calendario. Su éxito fue nulo, pero es algo realmente avanzado para le época en la que vio la luz. La pantalla era monocroma y contaba con una resolución de 160×293 píxeles. Como dato curioso, el dispositivo contaba con una memoria RAM de nada más y nada menos que 2 MB. Contarle al inventor que en 2016 tendríamos 6 GB de RAM y pantallas 2K en un teléfono móvil y seguro que habría caído enfermo.