Hace apenas unas horas os hemos traído toda la información respecto al Samsung Galaxy A50 y al Galaxy A30, la renovación de la gama media de la firma coreana que saldrá al mercado dentro de poco. Tras su presentación oficial hemos aprovechado que estamos en el Mobile World Congress para comprobar si Samsung había aprovechado la feria para mostrarlos al público y así ha sido, por lo que hemos podido probarlos para traeros nuestras primeras impresiones.
Tanto el Samsung Galaxy A50 como el Galaxy A30 cuentan con muchas similitudes, por eso hemos decidido unificar las dos tomas de contacto en una sola. Casi todas las similitudes de las que hablamos son del aspecto físico, pues por ejemplo la pantalla es idéntica en ambos modelos, por lo que en fotografías solo podréis diferenciarlos cuando los mostremos desde la parte trasera.
Un diseño casi idéntico en ambas versiones
Tanto el Samsung Galaxy A50 como el Samsung Galaxy A30 cuentan con una pantalla idéntica. Ambas son de 6,4 pulgadas con resolución FullHD+ y tecnología superAMOLED. Son los primeros teléfonos de Samsung que cuentan con un notch en su pantalla, concretamente un notch gota de agua, el cual tenemos que decir que cuenta con un tamaño muy compacto y que no ensancha para nada el tamaño de la barra de notificaciones, algo que valoramos mucho.
La calidad de los paneles nos ha sorprendido para bien y es que cuentan con una nitidez y una calidad de los colores realmente buena, incluso a la altura de otros terminales de gama alta. Sí que tenemos que puntualizar que todavía desconocemos el precio de estos terminales, por lo que no podemos catalogar la pantalla como buena o muy buena para su rango de precios, pero la verdad es que cualquier usuario estará satisfecho con la experiencia de visualización de esta pantalla.
En cuanto al apartado estético, encontramos alguna diferencia notable entre los dos modelos. El Samsung Galaxy A50 cuenta con tres cámaras traseras, mientras que el Samsung Galaxy A30 opta por la inclusión de dos sensores. Además, el Samsung Galaxy A50 cuenta con el lector de huellas en la pantalla, mientras que el A30 mantiene un lector de huellas tradicional en la parte trasera. Por lo demás, son idénticos estos terminales.
Ambos cuentan con plástico como material de construcción, incluso en el marco del chasis. Esto es algo que no nos ha gustado demasiado, pues ya hemos visto otros modelos de la marca de esta gama con trasera de cristal (o plástico simulándolo) y marcos metálicos. En este caso, la trasera sí que podría pasar por cristal a algunos usuarios, pero los marcos se ven claramente como plástico, ni siquiera han recibido un acabado mate, pues cuentan con algunos reflejos.
La diferencia entre dos o tres cámaras no se nota
Hemos probado rápidamente las cámaras de estos Samsung Galaxy A50 y Galaxy A30, las cuales cuentan con algunas diferencias técnicas, pero que no hemos podido apreciar bien al no poder ponerlos a prueba más que en las instalaciones del propio stand de Samsung. Ambas cuentan con un sensor principal normal de 25 megapíxeles, el cual ha mostrado tener un buen rango dinámico y nivel de detalle. Donde notamos algo de diferencia es en la cámara gran angular de ambos terminales, la del A50 es de 8 megapíxeles mientras la del A30 se queda en 5. Como era de esperar, el nivel de detalle es algo mejor en el A50, además de tener un mejor rango dinámico. Sobre la tercera cámara del A50, pues de momento parece que no aporta mucho.
Suponemos que el software de estos terminales todavía no está finalizado, pues cuando hemos querido probar la función de los AR Mojis la aplicación de cámara ha sufrido cierres forzosos, pero esto es algo que no veremos en las unidades finales.
¿Lector de huellas tradicional o en la pantalla?
Como os hemos dicho, el Samsung Galaxy A50 cuenta con el lector de huellas bajo la pantalla, al igual que el Galaxy S10, aunque nos ha dado la sensación de que en este caso opta por la tecnología óptica en vez de ultrasónica. Esto lo hemos deducido al ver que la zona del lector se iluminaba al tocarla con el dedo, algo que no vemos en el S10. La velocidad de respuesta de este sensor tenemos que decir que es bastante lenta y que falla bastante. En parte porque el software no nos muestra donde está el sensor con la pantalla apagada, por lo que habrá que acostumbrarse a saber donde está colocado.
Por otro lado, el Galaxy A30 cuenta con un lector de huellas capacitivo en la parte trasera, algo que hemos visto en centenares de teléfonos y que podemos decir que tiene una respuesta mucho más rápida que la que vemos en el lector de huellas del Galaxy A50, por lo que a no ser que Samsung haga mejoras sobre la velocidad de su lector, muchos usuarios seguirán optando por un lector tradicional, aunque el de la pantalla sea mucho más innovador.
En general ambos terminales nos han dado muy buenas sensaciones, la interfaz del sistema quizás es algo grande, probablemente culpa de OneUI, pero se mueven con soltura. A falta de conocer el precio, vemos que Samsung ha hecho un buen trabajo con estos dos terminales, aunque habrá que ver si mantienen una buena relación calidad-precio o si se quedan algo cortos respecto a la competencia.