El Mobile World Congress 2015 a la vuelta de la esquina y no dejan de aparecer noticias que nos dejan más que sorprendidos. Y esta vez, viene de la mano de Qualcomm apuntando de lleno al panorama de Samsung y lo que podría traer el próximo Samsung Galaxy S6.
Ayer el gigante Qualcomm presentaba sus resultados financieros y prepara el terreno para un posible 2015 no tan prometedor como se esperaba. ¿El motivo? Desde la propia Qualcomm aseguran que durante 2015, un importante cliente no incorporará el procesador Snapdragon 810 en su buque insignia de este año.
Aunque el fabricante de procesadores evitó dar nombres concretos, todo apunta a que será Samsung la que ha llevado a cabo esta decisión,como ya os comentábamos en ProAndroid hace una semana, especialmente después de los problemas de sobrecalentamiento que ya se reportaron el pasado mes de diciembre. Sin embargo, ahora parece que la decisión está tomada y lo que parecía ser algo temporal por parte de Samsung —la utilización de Exynos hasta que el Snapdragon 810 estuviese a punto— previsiblemente será definitivo.
De esta manera, y tras las palabras de Qualcomm, está claro que Samsung es la que tiene las papeletas de estar detrás de todo esto, especialmente por su capacidad de producir sus propios procesadores, los Exynos. Y de esta manera, apostar por su propia tecnología en un buque insignia. Algo que ya ha ido haciendo anteriormente, aunque alternando la producción de Exynos y Qualcomm, enfocados cada uno a mercados completamente distintos.
Como resulta evidente, a muchos nos puede resultar una decisión demasiado temeraria, teniendo en cuenta que estamos hablando de un buque insignia: el mayor referente de la marca durante un año concreto, en este caso el 2015.
Sin embargo, dado este problema de Qualcomm, Samsung se encuentra con la oportunidad perfecta de, por un lado, excusar el uso de un Exynos en un flagship en detrimento de Qualcomm —algo que la industria y medios no podrían ver demasiado bien—; y, por otro lado, demostrar a todo el mundo que un Exynos tope de gama puede estar a la altura de un Qualcomm Snapdragon 810. Y así poder llegar a revolucionar la industria de la telefonía móvil y que los procesadores Exynos pasen a hacer frente a Qualcomm y evitar su casi monopolio en el mercado de procesadores “potentes”. Es decir, convertirse en un referente en procesadores.
¿Será Samsung la compañía a la que se refiere Qualcomm? ¿Tomará Exynos un nuevo rumbo en el mercado móvil?