Seguramente habréis observado que la mayoría de los titulos que lanzan las distintas empresas en el sector móvil son ridículamente parecidos. Ya lo hemos visto hace unos dias con la salida del juego de Futurama, que es sospechosamente parecido a otros títulos como Los Simpsons o Padre de Familia. Hoy vamos a analizar este modelo de negocio y a descubrir el porqué de los juegos similares a Clash Royale, Los Simpsons, Temple Run, Yu-Gi-Oh! y Candy Crush.
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Y es que esta práctica cada vez más común está repercutiendo negativamente en el desarrollo de la industria del videojuego en los sistemas operativos móviles. Quédate aquí para descubrir por qué.
«Distintos juegos», un mismo modelo de negocio
Si os hablo de los títulos anteriormente mencionados seguramente habréis probado alguno de éstos al menos una vez. En resumen, son juegos entretenidos, con un apartado gráfico aceptable y un factor común entre todos ellos: el mejor siempre es el que más paga. No importa si habéis dedicado el doble de horas que otro jugador, siempre será mejor éste último.
Esto no solo repercute negativamente en la jugabilidad, sino también en el desarrollo a futuro de otros juegos o proyectos, porque ¿quién va a desarrollar un juego con una historia y unos gráficos dedicados pudiendo desarrollar uno de cartas o de conquista de territorios? No es casualidad que Clash Royale o Candy Crush sean dos de los juegos más rentables en la Play Store, al fin y al cabo siguen este mismo patrón y poseen un factor adictivo muy potente (que se lo digan a la cartera del mejor jugador de Clash Royale).
Asimismo, el hecho de que estos juegos sean tan parecidos no sería tan grave si no pecasen del mismo modelo de negocio: el Free to Play. Es el modelo que más ingresos genera actualmente, y es que para los usuarios es más atractivo el hecho de ver un juego que se comercia de forma «gratuita» a otro que impone un precio de antemano para su disfrute, si bien al final se acaba gastanto más dinero en el primero. Esto provoca que la mayoría de los juegos se centren en una temática destinada a sacar tajada de cualquier movimiento en lo que a términos del juego se refiere, generando en sus usuarios una sensación más similar a la ludopatía que a la evasión psicológica que cualquier juego tendría que presentar.
Lo que pudo ser y no fue
Los juegos que pudieron ser y no han sido, y tampoco lo serán: ¿quién no ha pensado al ver el título de juegos como Los Simpsons, Yu-Gi-Oh! o incluso Pokémon GO que tendriamos desarrollos con una historia relacionada con la propia saga? A fin de cuentas, es lo que el Free to Play está consiguiendo: titulos mediocres que aprovechan el nombre de una saga para conseguir un beneficio económico brutal.
Pero no todo es negro en el cielo de los juegos. Existen otras empresas desarrolladoras que apuestan por otro tipo de modelo de negocio, con títulos la mar de interesantes y que sí saben aprovechar el nombre de una saga. Es el caso de SQUARE ENIX con Final Fantasy o Rockstar con sus GTA . Títulos llevados a la pequeña pantalla y que sí hacen de la industria del videojuego móvil un lugar agradable. Esperemos que Nintendo y Electronic Arts sigan los pasos de éstas, no queremos más copias ni juegos similares a Clash Royale.
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