Con la reciente presentación de los Google Pixel 4 y Pixel 4 XL, es el momento de comparar este teléfono con otras alternativas del mercado, pero antes de nada, hemos querido echar la vista atrás y ver qué ha cambiado respecto a su antecesor. El Google Pixel 3 fue su apuesta para la gama alta el año pasado, pero ha experimentado muchos cambios respecto a los nuevos Google Pixel 4, por eso hemos querido compararlos cara a cara y apreciar todos esos cambios.
En todo momento queremos aclarar que se trata de una comparativa de características, pues todavía no hemos podido echarle el guante a este Google Pixel 4, por lo que intentaremos ser lo más objetivos posible. También queremos recalcar que vamos a comparar las versiones normales, no las XL, pues al final las características internas son las mismas. El único apartado en el que haremos un inciso para las versiones XL, será en el diseño, pues en el Pixel 3 veíamos dos apartados estéticos diferentes.
5,7 pulgadas FullHD+ OLED a 90 Hz | 5,5 pulgadas FullHD+ OLED | |
Qualcomm Snapdragon 855 y Pixel Neural Core | Qualcomm Snapdragon 845 | |
Principal de 12 megapíxeles con tecnología Dual Pixel | 12.2 megapíxeles, f/1.8, 1/2.55″, 1.4µm, dual pixel PDAF, OIS | |
Telefoto de 16 megapíxeles | ||
Android 10 con 3 años de actualizaciones garantizadas | Android 9.0 Pie actualizable a Android 10 | |
Extras | Reconocimiento facial, altavoces estéreo, Motion Sense, USB C | Lector de huellas, altavoces estéreo, UBS C |
En este apartado encontramos las diferencias esperadas tras la renovación de un terminal un año más tarde. Los cambios más obvios en los que nos podemos fijar es el procesador, que pasa del Snapdragon 845 al Snapdragon 855, los 4 GB de memoria RAM que por fin ascienden a los 6 GB (después de tres generaciones, hacía falta) y la doble cámara trasera, pero hay bastantes cambios más allá de eso.
El primero y quizás el que más nos guste, es el de su pantalla. Si bien el tamaño no ha cambiado en exceso, el aumento de la tasa de refresco hasta los 90 Hz nos parece un gran acierto, pues es una característica que otorga una fluidez superior a la media a los teléfonos que cuentan con ella y que durante este año veremos como se estandariza en la gama alta. Esta pantalla implica un mayor consumo también (si tenemos los 90 Hz activados), por lo que la reducción de su batería nos plantea serias dudas sobre la autonomía de este Google Pixel 4, que probablemente sea inferior a la de su antecesor, que no era para tirar cohetes precisamente.
Otro gran cambio lo vemos en el sistema de seguridad del teléfono. Google ha dejado de lado el lector de huellas dactilares tras muchos años utilizándolo en la parte trasera y ha dado el salto al reconocimiento facial. Este sistema promete ser más cómo y más rápido que los lectores de huellas en pantalla, que en más de una ocasión hemos criticado en Pro Android. Junto a este reconocimiento facial, también tenemos el radar Soli para utilizar Motion Sense, es decir, el control del teléfono por gestos en el aire. Se trata de una característica llamativa, pero habrá que probarla para comprobar su utilidad.
Desde la llegada de los Google Pixel, la firma ha mantenido algunas características del diseño de estos terminales en cada una de las generaciones. La trasera bicolor, de doble material o doble textura era una de las señas de identidad de estos teléfonos, pero en los Google Pixel 4, eso se ha acabado. Estos Google Pixel 4 cuentan con un módulo de cámaras traseras cuadrado, de gran tamaño, donde se encuentran los dos sensores de cámara, el flash LED y un láser autofocus. Este módulo de cámara es el único elemento de una parte trasera limpia de cristal, con un único color y acabado, nada de dobles texturas. El acabado es mate y está disponible en color negro, blanco y naranja.
El Google Pixel 3 también apostaba por toda la parte trasera en cristal, pero en la zona superior tenía un acabado mate y en la parte inferior, glossy. La única cámara trasera se encontraba ubicada en la esquina superior izquierda, de forma más discreta, junto a un micrófono y el flash LED. En la misma parte trasera también nos encontrábamos con el lector de huellas tradicional, elemento que este año desaparece.
Precisamente desaparece en los Google Pixel 4 para dar paso al reconocimiento facial. Los sensores de este método de seguridad los encontramos en un marco superior de pantalla con un tamaño considerable, aunque similar al del Google Pixel 3. Es en el caso del modelo XL dónde más destaca, pues el notch no continúa en esta generación, que cuenta con el mismo diseño que el modelo compacto. El marco inferior del Google Pixel 4 es significativamente menor que el de su antecesor, pero hay que destacar que ya no tenemos un doble altavoz frontal, pues el principal de multimedia se encuentra en la parte inferior.
Respecto a los marcos del teléfono, todas las versiones del Google Pixel 4 apuestan por unos marcos de color negro, con detalles de color en el botón de bloqueo, mientras que en su antecesor, los marcos del teléfono se correspondían con la versión de color de nuestra unidad.
Antes hemos podido ver que la pantalla del Google Pixel 4 pasaba de las 5,5 pulgadas del Pixel 3, a las 5,7, un tamaño ligeramente mayor, pero que mantiene un diseño compacto para el terminal. Respecto a la tecnología de la pantalla y su resolución hay pocos cambios, pues seguimos frente a un panel OLED con resolución FullHD+, aunque en este caso con un formato ligeramente más panorámico. La gran diferencia en este apartado, es la tasa de refresco de la propia pantalla, que ahora es de 90 Hz.
De normal las pantallas tienen una tasa de refresco de 60 Hz, pero con el OnePlus 7 Pro se puso de moda subir los Herzios hasta los 90, lo que favorece en gran medida la fluidez del teléfono, que se mueve con un 50% más de fluidez. Esto, combinado con el software de Google, hará que su nuevo flagship vuelva a ser uno de los teléfonos más fluidos del mercado, aunque también es cierto que eso aumenta el consumo, por lo que podríamos ver peor autonomía en este Google Pixel 4 que en el Google Pixel 3.
El Google Pixel 4 es el primer teléfono de la marca en contar con dos sensores de cámara en la parte trasera del teléfono. El principal sigue siendo de 12 megapíxeles, pero ahora contamos con un sensor telefoto de 16 megapíxeles que nos permitirá dar otro punto de vista a nuestras fotografías. Es cierto que nos hubiese gustado ver también un gran angular, pero esta cámara del Google Pixel 4 será más versátil que la de su antecesor. Aparentemente, los resultados son mejores que los del Google Pixel 3 y este año Google tiene todas las papeletas para volver a ser la cámara mejor valorada en el apartado fotográfico.
Respecto a la cámara frontal, hemos visto como el Google Pixel 4 ha renunciado al segundo sensor que veíamos en el Pixel 3 que nos ofrecía la posibilidad de captar selfies con una cámara gran angular. Ahora el único sensor del Google Pixel 4 ya es gran angular de por sí.