Si no vives en China y no usas un iPhone tienes que amar Google y todas sus aplicaciones. El gran buscador pone a nuestra disposición decenas de aplicaciones totalmente gratuitas que en la mayoría de casos son mucho mejor que las de pago en Google Play. Uno de los mejores ejemplos es Google Maps, del cual ya hemos hablado largo y tendido, cosa que se merece dada su calidad y funcionalidad.

Ya puedes pedir un taxi desde Google Maps

Tener esta aplicación instalada en nuestro teléfono nos ahorra comprar un GPS, el cual nos puede costar hasta 70 u 80 euros si no cogemos uno con demasiadas funciones. En cambio con nuestro móvil y la aplicación de Google Maps podemos hacer todo lo que no podemos con el GPS más avanzado. Además si lo compaginamos con Google Now y su reconocimiento de voz seremos dioses al volante.

Google Maps aunque te sepas el camino

Hoy queremos hablaros sobre una de las mejores funciones que tiene Google Maps y que posiblemente desconocías. Usar esta aplicación cuando no sabes el camino hacia donde vas, es una de las mayores opciones que nos deja, pero también existe la posibilidad de usar la aplicación cuando te sabes el camino perfectamente.

Con el modo «empezar a conducir» de Google Maps podremos tener información del tráfico en tiempo real. Puede que no le veas mucho sentido, pero si vas todos los días a trabajar y alguno que otro llegas tarde por elegir la ruta más rápida, en la cual hay un accidente, posiblemente hubieras deseado que alguien te informase de ello.

Para eso está el nuevo modo, ya que podemos ver mediante colores el estado de las carreteras de todo el país, consiguiendo detectar a tiempo un accidente o una retención para poder optar por otra carretera. Pero no solo eso, sino que también nos avisa de calles cortadas por obras o por cualquier impedimento que no permite el tráfico normal.

Activarlo es muy sencillo, y tan solo tendremos que abrir el menú de Google Maps y pulsar sobre «empezar a conducir». Una vez lo hayamos hecho veremos como nos muestra las carreteras con un color verde, naranja, rojo o granate, dependiendo del estado del tráfico. Lo bueno es que no tenemos que tener una ruta en marcha, simplemente iremos conduciendo, sin que Google nos indique nada, y solo nos muestre el estado de la carretera en tiempo real.

Otra de las ventajas que encontramos son los destinos conocidos. Según por donde estemos conduciendo Google sabrá recomendarnos destinos dependiendo de las rutas que hemos elegido anteriormente.