Tras su esperada vuelta a la fabricación de dispositivos móviles, hemos podido probar el nuevo Nokia 5, su apuesta por la gama media premium. Hemos podido ponerlo a prueba y sacarle tanto los aspectos positivos como los negativos a un dispositivo ambicioso y deseado por muchos.
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Todas las valoraciones que hagamos del Nokia 5 son teniendo en cuenta que estamos frente a un terminal de gama media, por lo que, en algunos apartados, tanto por precio como por características, no podremos compararlo con terminales de gamas superiores.
Características completas del Nokia 5
- Pantalla de 5’2 pulgadas en resolución HD protegida por Corning Gorilla Glass
- Procesador Qualcomm de ocho núcleos a 1.4 GHz, el Snapdragon 430
- 2 GB de memoria RAM
- 16 GB de almacenamiento interno ampliables hasta 256 GB mediante MicroSD
- Cámara trasera de 13 megapíxeles con f/2.0 y doble flash LED de doble tonalidad
- Cámara frontal de 8 megapíxeles con f/2.0
- Batería de 3000 mAh
- Android 7.1.1 Nougat sin capas de personalización
Como vosotros mismos podéis comprobar, las características del Nokia 5 no son punteras ni mucho menos, pero sí deberían ser más que suficientes para arrojarnos un buen rendimiento, sobretodo para el mercado al que está orientado este Nokia 5, pues ronda los 200 euros, con lo que no podemos esperar características de gama alta por este precio.
Diseño y construcción del Nokia 5
Si hay algo que nos ha impresionado de primeras en el análisis del Nokia 5 es su diseño y su calidad de construcción, pues estamos frente a un terminal bonito, construido en metal, que lo hace sentir muy sólido en la mano y que le da un aspecto premium que nos ha gustado mucho.
La parte frontal del Nokia 5, también tiene nuestro visto bueno, pues los marcos no son excesivamente grandes para un dispositivo de 5’2 pulgadas, sobretodo los marcos laterales, que son bastante contenidos. En el margen inferior tenemos los botones capacitivos, siendo que además el botón central también funciona como lector de huellas dactilares.
En el lateral derecho no tenemos nada que sorprenda demasiado, solo el botón de desbloqueo y las teclas de volumen, en una posición muy buena, pues alcanzaremos todas las teclas sin esfuerzo. En la parte superior, solo contamos con el Jack de 3.5 milímetros, mientras que en la parte inferior encontramos el puerto de carga, que es MicroUSB (nos hubiera gustado ver el salto a Tipo-C) y el altavoz, que si bien no es una mala posición, pues no se obtura cuando dejamos el terminal en la mesa, sí podemos taparlo mientras estamos jugando. En la parte trasera, encontramos el logo de la marca, junto con la cámara trasera y el doble flash LED.
Pantalla, a veces se necesita más
Como ya os hemos comentado antes, la pantalla de Nokia 5 es de 5’2 pulgadas en resolución HD y tecnología IPS. El tamaño de la pantalla nos gusta mucho, es apto para todo tipo de públicos, pues no es demasiado grande ni demasiado pequeña, pero lo que no nos gusta tanto es la decisión de incorporar un panel en resolución HD. A la distancia de uso habitual es difícil notar la diferencia respecto a una FullHD, aunque es cierto que si te acercas (más de lo habitual) el dispositivo y te fijas en los textos más pequeños, se puede notar la diferencia de densidad de píxeles.
Quitando este aspecto, se nota que la pantalla del Nokia 5 es de buena calidad, pues tiene un brillo máximo muy alto, que nos permitirá disfrutar de la misma bajo la luz del sol y un brillo mínimo lo suficientemente bajo para no molestar en condiciones de baja luz. En cuanto a los colores, no podemos decir que sean malos ni mucho menos, pero la verdad es que nos han parecido un poco fríos y se echa en falta la posibilidad de calibrarlos, pero es un mal menor al que nos acostumbraremos en cuestión de minutos.
Como detalle, nos ha gustado poder editar la densidad del contenido de la pantalla siempre que queramos, en 3 niveles preestablecidos, que nos permitirán poder visualizar el contenido de esta en un tamaño adecuado para nuestras necesidades.
Cámara, mejor de lo esperado
Si bien teníamos muchas expectativas en el Nokia 5, no la teníamos tanto en su cámara, pues sabemos de sobra que un terminal que ronda los 200 euros, no puede incorporar un sensor de alta gama, pero la verdad es que nos ha sorprendido, arrojando resultados bastante buenos teniendo en cuenta su rango de precio. De día, las fotografías son de muy buen nivel, tanto los colores, como el detalle y el rango dinámico son muy buenos. Además, nos ha sorprendido la capacidad que tiene de enfocar a objetos cercanos, los que no permitirá hacer fotografías un poco más trabajadas. Lo que nos ha llamado la atención es que la toma de fotografías podría ser más rápida, aunque igual este defecto es corregido en una futura actualización.
De noche la cosa cambia, pues las fotografías salen muy amarillentas y el detalle cae en picado debido a la aparición de grano en la fotografía. La aplicación de cámara del Nokia 5 es muy sencilla, de carga lenta como ya os hemos comentado, tanto a la hora de entrar en ella como a la hora de tomar una fotografía. Con ella podremos hacer lo justo y necesario, sacar el terminal, hacer la fotografía y guardarlo, no podremos calibrar demasiados ajustes.
Rendimiento y experiencia de uso
Teniendo en cuenta que el Nokia 5 monta un procesador de ocho núcleos fabricado por Qualcomm, el Snapdragon 430, y 2 GB de memoria RAM, esperábamos un rendimiento correcto, capaz de mover casi cualquier aplicación de forma fluida, pero la verdad es que nos hemos llevado una desilusión. Las animaciones son fluidas, el sistema en sí se mueve bastante bien (en parte por Android 7.1.1 Nougat sin capa de personalización), aunque el tiempo de carga de las aplicaciones es más lenta de lo que nos gustaría (notándose más en los juegos).
En el caso de los juegos que requieran bastante potencia gráfica, suele haber caída de frames. Por esto mismo, el Nokia 5 no está hecho para gamers, quedándose un paso atrás en rendimiento frente a sus rivales directos de precio. Esperemos que con futuras actualizaciones podamos ver una evolución en este apartado, pues sabemos de sobra que este procesador puede comportarse realmente bien y tener mejores resultados que los que hemos obtenido durante nuestro periodo de prueba.
Batería, nada que objetar
Con 3000 mAh, habrá quien piense que la batería del Nokia 5 no es suficiente, mientras que otros, piensen que es una barbaridad. En pleno 2017, las baterías de semejante capacidad que son algo de lo más normal y no es algo que haga destacar al Nokia 5, ni para bien, ni para mal. Con esta capacidad, hemos podido utilizar el Nokia 5 a lo largo de día completo unas 5 horas aproximadamente, unos días más y otros días menos, según el uso que le hayamos dado ese día en cuestión.
Para que os hagáis una idea, un día de uso moderado, de Whatsapp, redes sociales y alguna foto, hemos llegado a obtener 5 horas y 20 minutos, mientras que los días en los que hemos ejecutado juegos pesados como Asphalt 8 o Last Day on Earth, la autonomía se ha quedado en las 4 horas de pantalla activa. Algo que si nos ha gustado mucho, es el poco consumo que realiza en reposo, muy logrado.
Conclusiones del Nokia 5
Tras estos días utilizando el Nokia 5 como dispositivo personal, el veredicto final es un tanto difícil, ya que hay apartados que nos han gustado mucho, como el diseño, la construcción y el software, pero el rendimiento en tareas complejas no acaba de convencer.
Lo que no podemos negar, es que Nokia causa nostalgia en muchos de nosotros y no hay mejor juez que uno mismo, por lo que si buscas un dispositivo por unos 200 euros, el Nokia 5 es sin duda una opción a considerar.
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