Si bien estamos acostumbrados a hablar sobre los terminales de más alta gama, pues son en los que más énfasis ponen las marcas a la hora de presentarlos, no quita que también nos guste hablar sobre el mercado de la gama media, donde vemos terminales que nos ofrecen características muy interesantes, tanto en diseño como en funciones, dignas de un terminal de gama alta o que han sido heredadas de sus hermanos mayores. Hoy, os traemos el análisis del bq Aquaris V, un terminal de gama media pero sorprendente en varios aspectos.
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Hemos pasado una semana utilizando el bq Aquaris V como teléfono personal y ya podemos decir que es aquello que nos ha gustado más y que nos ha gustado menos, pero antes, realizaremos un análisis exhaustivo de todos sus apartados, para que podáis profundizar en la experiencia con este terminal si es que estáis pensando en adquirirlo.
Un diseño sin demasiadas pretensiones
El bq Aquaris V no es que conquiste por su apartado estético. Cuenta con una pantalla de 5’3 pulgadas, custodiada por un marco inferior mucho más grande de lo que nos gustaría bien, mientras que el superior sí que mantiene unas dimensiones mucho más adecuadas. En el marco inferior, encontramos los botones de navegación, no retroiluminados, donde resalta el botón de inicio que tiene la misma forma que el logo de la firma, una buena forma de reconocer que un teléfono pertenece a bq sin necesidad de girarlo.
En cuanto a la construcción general, estamos frente a un dispositivo de aluminio en su mayor parte, aunque en la parte trasera nos encontramos con dos grandes bandas de plástico, que llegan a cubrir los bordes laterales y superiores del terminal. Estas dos bandas, servirán de antena, para que las conexiones puedan salir del teléfono y el hecho de que las esquinas también cuenten con ese mismo plástico, nos garantiza que absorberán mejor un impacto que si fueran totalmente de metal, como vemos en otros dispositivos.
Si vemos el terminal desde detrás, nos recuerda irremediablemente al OnePlus 3/3t, debido a la posición y forma de la cámara y el flash LED, aunque la inclusión del lector de huellas dactilares en la parte trasera, junto con el logo de bq le da más seña de identidad al bq Aquaris V. La parte trasera, a pesar de ser metálica hemos notado que atrapa mucho las huellas, aunque tal vez sea por el color de nuestra unidad, que como podéis ver en las imágenes, es el negro.
En cuanto a la posición de los elementos a lo largo del chasis del teléfono, vemos que todo está donde debería estar. Las teclas de volumen y bloqueo están a la altura ideal para que sea cómodo presionarlas y el lector de huellas, en el lugar perfecto para que nuestro dedo índice lo localice al instante y así tener un desbloqueo mucho más rápido.
Pantalla, luces y sombras
Como os hemos comentado anteriormente, el bq Aquaris V cuenta con una pantalla de 5’3 pulgadas en resolución HD (1280 x 720 píxeles), que si bien no está mal, nos hubiera gustado ver como llegaba a la resolución FullHD, sobretodo a la hora de consumir contenido multimedia, que nos hemos visto un poco cortos. En cuanto a la calidad del panel, sí que hay que decir que hemos notado que es de muy buena calidad, pues los colores se ven muy vivos, sin llegar a estar demasiado saturados. Además, los negros son muy profundos (al principio incluso dudé de si era AMOLED) y los blancos tiran un poco hacia tonos azulados, pero sin se molesto.
Probablemente los niveles de brillo sea lo que más nos ha gustado de esta pantalla pues el brillo mínimo es apto para consumir contenido de la pantalla a oscuras sin ser molesto, lo que sumado al modo de protección ocular, ayuda mucho en la experiencia de usuario. En cuanto al brillo máximo, la cosa mejora, pues según nos comenta bq, la pantalla del bq Aquaris V cuenta con un brillo máximo de 520 nits, que si bien está por debajo de los más de 1000 nits del Samsung Galaxy Note 8, nos ha permitido disfrutar de la pantalla a plena luz del día y sin tener el brillo al máximo. Además, desde los ajustes podremos activar una opción para aumentar el brillo máximo de esta.
Rendimiento, por encima de lo esperado
En temas de rendimiento, el bq Aquaris V no levantaba demasiadas expectativas, la inclusión del Qualcomm Snapdragon 430 no nos daba demasiadas esperanzas en cuanto a rendimiento, pues es el procesador que están utilizando a día de hoy terminales de gama media-baja, aunque al estar acompañado de 3 GB de memoria RAM y una versión muy pura de Android, podía estar cerca de lo esperado. La realidad, os podemos contestar ya, es que ha sido bastante diferente, aunque hemos tenido algún sabor agridulce.
A la hora de utilizar de diario el bq Aquaris V, no hemos sentido la necesidad de tener más potencia, pues el sistema funcionaba de forma fluida y no teníamos tirones de lag en ninguna situación. Como pega, diremos que las aplicaciones tardaban algo más en cargar de lo que nos gustaría haber visto, pero no podemos olvidar el precio del dispositivo y que no sería justo compararlo con un Qualcomm Snapdragon 821 en este apartado. En cambio lo que nos ha encantado ha sido la forma de gestionar la multitarea y es que a pesar de contar con 3 GB (que a día de hoy hay quien piensa que es poco), ha mantenido las aplicaciones en segundo plano perfectamente. Como curiosidad, decir que incluso después de cerrar la aplicación en la lista de apliaciones, al volver a abrirla, seguía en el punto que la dejamos.
En cuanto la experiencia de usuario, bq nos ha dejado Android 7.1.2 lo más limpio que ha podido, incluyendo solamente alguna aplicación propia y nada más, por lo que todo el sistema se mueve de forma realmente fluida, así que si os gusta Android stock, el bq Aquaris V puede ser una gran alternativa para vosotros. Además, al venir con esta versión, se nos garantiza su actualización a Android 8.0 Oreo, por lo que en ese aspecto, estamos cubiertos. Lo único destacable en este aspecto, es un reinicio que tuvimos sin estar utilizando apenas el dispositivo, aunque lo achacamos a una versión de software temprana y que recibirá pronto una actualización.
Cámara, básicamente lo mejor del bq Aquaris V
En el apartado fotográfico, nunca tenemos buenas expectativas en el mercado de la gama media, todos los terminales suelen tener sensores y procesados similares, pero bq ha dado un golpe sobre la mesa con la cámara del bq Aquaris V, incorporando un sensor de gran calidad y un procesado por encima de la media. Concretamente, estamos hablando del Sony IMX386, un sensor de 12 megapíxeles que ya hemos visto en otros terminales, como el Meizu MX6 que analizamos aquí y que ofrece resultados realmente buenos en todos los aspectos.
Las fotografías diurnas cuentan con un buen rango dinámico e interpretación de los colores, que si bien tiende un poco a enfriarlos, veremos que las fotografías tomadas son realmente atractivas y cuentan con un buen nivel de detalle. En fotos nocturnas, vemos como desaparece en parte ese nivel de detalle y las luces tienden a salir amarillentas, pero aparece poco ruido, lo que ayuda a que la foto no se eche a perder. Si queremos algo de mejor rango dinámico, podemos utilizar la función de HDR o de HDR+ (como vemos en los terminales de Google), lo que hará de la experiencia fotográfica algo mucho más placentero.
En cuanto a la cámara frontal, poco hay que comentar, ofrece una buena calidad y nivel de detalle con sus 8 megapíxeles, además la inclusión de un flash LED delantero es de gran utilidad en tomas nocturnas. En cuanto a la aplicación, es bastante completa y nos permite configurar manualmente bastantes apartados, como el enfoque, la captura en RAW o el tiempo de exposición, pero hay dos aspectos que nos nos han gustado. El primero es que la visualización de la escena en la app de cámara es nefasta, el nivel de detalle es pésimo y al principio hace pensar que cuenta con un mal sensor, pero cuando ves la fotografía final te das cuneta que no es así. El segundo es que en el modo de cámara lenta, solo podremos hacerlo a 480p, una resolución demasiado baja incluso para la pantalla del bq Aquaris V.
Autonomía, más que suficiente para el día a día
Con 3100 mAh de batería, no esperábamos maravillas de la autonomía del ba Aquaris V, pero sí que nos hemos dado cuenta que es más que suficiente para aguantar el día entero si somos usuarios muy exigentes, pues hemos conseguido llegar casi a las 7 horas de pantalla activa durante un día, pero si no lo somos tanto, la media de resultados era sobre las 5 horas y media de pantalla activa en un día y medio aproximadamente. Como podéis ver en las capturas, tras 23 horas de uso, aún nos queda un 15% de batería con 5’30 horas de pantalla activa.
Si esta autonomía le sumamos la tecnología Quick Charge 3.0 de Qualcomm con la que cuenta este dispositivo, veremos que si necesitamos algo de batería extra, en pocos minutos tenemos bastantes horas de uso. Esto solo puede mejorar si bq decide incorporar un cargador de esta tecnología en la caja y, por extraño que parezca, así es, pues el cargador que viene de serie, tiene tecnología Quick Charge 3.0, lo cual nos permitirá cargar el teléfono aproximadamente en una hora y veinte minutos.
Nuestra opinión del bq Aquaris V
Tras este tiempo probándolo, nos hemos dado cuenta que el bq Aquaris V es un terminal muy completo para su rango de precios, pues podemos encontrarlo por 199 euros en su tienda oficial y en Amazon y que nos ha dejado muy buen sabor de boca en su apartado fotográfico, muy por encima al de su competencia y también en la gran experiencia de usuario que nos ha ofrecido con unas características más bien modestas. Por otro lado, si tenemos que decir algo que no nos ha gustado, son los detalles que hemos nombrado en el apartado de la cámara y la resolución de la pantalla, que nos hubiera gustado ver como crecía hasta FullHD, pero por todo lo demás, el bq Aquaris V nos ha ofrecido una experiencia muy satisfactoria.
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