La lucha de los procesadores, es algo que lleva con nosotros mucho tiempo. Nadie ha ganado la guerra, pero hace poco vimos como Qualcomm perdía una batalla importante. Sí, estamos hablando del Snapdragon 810, un procesador que dejó a Qualcomm muy mal parada, con la consecuencia de que Samsung, decidiera montar sus propios procesadores en la gama alta. Desde entonces, todos los años vemos como la variante Europea del Galaxy S, cuenta con un procesador Exynos. Algo que también hemos visto en la gama Note.

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No se le puede discutir nada a la compañía, ya que estos procesadores funcionan a la perfección, y en algunos casos hemos podido ver como mejoran la autonomía del dispositivo frente a los Qualcomm. Parece que 2017 no será un año muy diferente en este sentido, ya que los Galaxy S8 volverán a compartir procesadores Qualcomm y Exynos, aunque ciertamente, los dos están fabricados por Samsung. 

Exynos 8895 fabricado en 10 nanómetros

El procesador que montará el nuevo Samsung Galaxy S8, será un Exynos 8895. Al igual que su homólogo, el Qualcomm Snapdragon 835, estará fabricado en 10 nanómetros, y parece ser que la tecnología usada por Samsung será la misma para los dos procesadores. Esto nos deja saber, que tendremos dos chips muy equiparables, tanto en rendimiento, como en consumo energético, donde cada vez vemos más avances.

El Exynos 8895 será un procesador octa-core, y contará con 4 núcleos Exynos M2 con una velocidad de hasta 2,5 Ghz, y otros 4 núcleos Cortex-A53 con una velocidad de hasta 1,7 Ghz. Esto nos dejará con un rendimiento más que aceptable, pero tendremos que ver las diferencias con el Snapdragon 835, si es que somos capaces de apreciarlas.

El procesador está preparado para todo, y soportará categoría 16 LTE, almacenamiento UFS 2.1 y RAM LPDDR4, por lo que estaremos frente a uno de los mejores chips del año. No veremos este nuevo procesador hasta que el Samsung Galaxy S8 se presente, y como ya estamos acostumbrados, la versión con el Exynos 8895, irá destinada a todos los países que no sean EEUU o China. 

Este render del LG G6 nos deja un terminal sin módulos