Huawei sigue sorprendiendo al mundo. La calidad de los móviles chinos es cada vez más destacada en un mercado en el que la gama alta se presenta como la pieza clave para el resto de dispositivos. Hoy hablamos del Huawei P30 Pro, un terminal que hemos podido probar minuciosamente durante varios días y que se ha convertido en uno de los dispositivos más completos de la actualidad. El sistema fotográfico se muestra como el rasgo más destacado de un smartphone que llega con novedades en el apartado de diseño y con unas prestaciones similares a las del Mate 20 pero con ese plus fotográfico que le hace diferente.
Más o menos sabíamos lo que nos íbamos a encontrar el pasado 26 de marzo en el evento que Huawei había preparado en París. Influencers aparte, todos los acreditados en el acto estábamos expectantes por tener en nuestras manos el nuevo Huawei P30 Pro para desentrañar todas y cada una de sus cualidades y algunos de sus posibles fallos. Sin embargo, y nada más salir de la presentación, no pudimos aguantar más y decidimos probar el rasgo que más define a nueva serie P30: la cámara. En ese momento nos dimos cuenta que los resultados cosechados no eran normales, ya que una foto en la que se apreciaba París como una ciudad simplona con la Torre Eiffel a lo lejos (al menos para los miopes), se convertía en una instantánea bastante atractiva con solo pulsar un botón. El zoom híbrido 10x tiene un poder de “adicción” fuera de lo común, y la galería de todos los allí presentes puede dar cuenta de ello.
El Huawei P30 Pro ya es una realidad y se muestra al mundo como el smartphone con la mejor cámara del mercado. Un dispositivo muy bien equilibrado en el que todo se fusiona bajo EMUI 9.1 y del que pueden sacarse algunas pegas en ciertos apartados. La excepción hace la regla, y está claro que es complicado sacarle algún que otro “error” a un dispositivo de estas características. A continuación, te contamos todo lo bueno y lo malo de este terminal, los fallos más habituales y las cualidades a tener en cuenta para que puedas conocer todos y cada uno de los detalles del nuevo Huawei P30 Pro.
Un diseño atractivo con algunas variaciones destacadas
Las líneas estéticas de Huawei rezuman por cada uno de los componentes del Huawei P30 Pro. Nos encontramos con un diseño realmente atractivo en el que queda claro que lo que tenemos en nuestras manos es un dispositivo de gama premium. Hablamos de un cuerpo fabricado en cristal y metal en el que los bordes redondeados y la reducción de los marcos superiores e inferiores generan un aprovechamiento brutal de la pantalla. A nivel general, el P30 Pro es un terminal bonito que cumple con todos los estándares de la compañía llevados a un nivel superior.
No somos muy partidarios de las pantallas curvadas, pero está claro que desde Huawei han conseguido dar con la tecla con el P30 Pro. Los bordes laterales dibujan unas curvas con las que la compañía china quiere aportar ese toque premium a un dispositivo que se muestra realmente resbaladizo en la mano al que una bonita funda no le vendría nada mal. En los laterales podemos destacar la presencia de unos marcos metálicos con tono mate en el que se localizan los botones de volumen y encendido/apagado. Este último, incluye un pequeño detalle en coloro rojo que sirve para aportar ese toque diferencial con el que suelen conquistar a los más fanáticos de la estética.
Aunque si nos fijamos en la parte inferior, echamos en falta un conector de auriculares que ha sido sustituido, como viene siendo habitual, por el USB tipo C. Sin olvidarnos de la presencia del compartimento Dual SIM que abandona el lateral izquierdo con la finalidad de no romper la estética global diseñada por Huawei. En el borde superior destaca la incorporación de un sensor de infrarrojos que permitirá, por ejemplo, utilizar el dispositivo como mando a distancia.
En general, el terminal está bien equilibrado y tiene un peso total de 192 gramos. Un smartphone que no es del todo ligero y que se acerca a los límites para considerarse un dispositivo pesado, aunque no es un rasgo que se deje notar. En la parte trasera nos encontramos con uno de los aspectos más identificativos de este tipo de smartphones: la cámara. Sin duda, el elemento más destacado del Huawei P30 Pro con la que nos hemos quedado realmente sorprendidos a nivel de rendimiento y que, como dijimos anteriormente, es completamente “adictiva”. Eso sí, lo que no encontramos por ninguna parte es el lector de huellas trasero, un elemento de seguridad que se localiza bajo la pantalla delantera y que, por cierto, funciona mucho mejor que en el Mate 20.
El módulo de triple cámara destaca en una parte trasera brillante en la que el cristal se enmarca como el material protagonista y donde también hay espacio para el sensor TOF y un pequeño flash LED localizado a escasos milímetros a la derecha. Todo está unificado y la serigrafía de LEICA aporta ese toque distintivo con el que Huawei quiere hacer notar la calidad de su sistema fotográfico. Aunque otro de los cambios más importantes lo encontramos en una parte frontal donde el notch en forma de gota se muestra al mundo, en nuestra opinión, como la muesca más cómoda y utilitaria. Nada de notch kilométricos, agujeros en pantalla o botones físicos localizados en la parte inferior. Un conjunto de aspectos que permiten al Huawei P30 Pro aprovechar un gran porcentaje de pantalla en comparación con antiguos modelos.
El grosor no es muy diferente al del P20 Pro. En un principio, y tras confirmar la integración de una batería de 4.200 mAh, todo parecía indicar que aumentaría mucho de tamaño. No obstante, desde Huawei pueden estar orgullosos de este apartado. Eso sí, siempre tiene que haber aspecto sacrificado y, en este caso, es el peso. En otro orden de cosas, a nosotros nos tocó el dispositivo negro a pesar de todos los degradados llamativos que había preparado la compañía. Hablamos del terminal más discreto de la gama que, sin embargo, es uno de los que más nos gusta a excepción del modelo rojo lava o el blanco perla. Lo que está claro es los móviles negros suelen más elegantes y adecuados para el día a día.
En general, El Huawei P30 Pro es un terminal que sigue una línea continuista en la que se aprecian los destellos originales de la marca. Un dispositivo relativamente compacto en el que destaca el módulo fotográfico por encima del resto de elementos y donde la eliminación del sensor de huellas trasero y el Jack de auriculares se muestran como dos de los aspectos más destacados. Sin olvidarnos de unos bordes redondeados con los que la compañía china quiere diferenciar este modelo del terminal estándar. También podemos destacar una gama de colores adaptada para todos los públicos en la que pueden apreciarse las influencias de la cultura asiática.
Una pantalla de calidad que llega justa de resolución
El Huawei P30 Pro llega al mercado con una de las mejores pantallas de la actualidad en la que la resolución se encuentra al límite de la gama alta. Hablamos de un panel delantero con los bordes redondeados en el que la tecnología OLED se muestra como la auténtica protagonista de una pantalla perfectamente calibrada. Como viene siendo habitual en la marca, el panel del P30 Pro que ofrece una gran cantidad de opciones personalizables en el apartado de color y temperatura para que cada usuario pueda decidir a su gusto. En general, hablamos de una pantalla que incluye cierta continuidad respecto a anteriores modelos, pero con algunos cambios importantes que la hacen única en el mundo.
Nos encontramos con una resolución Full HD+ ((2.340 x 1.080) que se muestra como el límite de los dispositivos de este tipo. Una estrategia que Huawei sigue manteniendo en su gama alta y que además permite ahorrar un porcentaje importante de batería al dispositivo. Sin embargo, si miramos el precio, está claro que la compañía china debería haber optado por una subida de resolución que igualara dicha pantalla con la de sus máximos competidores. Aunque en nuestro caso siempre hemos mantenido activada la opción de resolución inteligente.
En cuanto las dimensiones, el Huawei P30 Pro aumenta el tamaño de su pantalla hasta las 6,47 pulgadas con un ratio del panel de 19.5:9 y una densidad de píxeles de 399 ppi. Un incremento importante si tenemos en cuenta que el P20 Pro solo alcanzó las 6,1 pulgadas. Este aumento de tamaño permite una mayor capacidad de aprovechamiento del panel, pero aumenta las dosis de incomodidad de un dispositivo que, en algunas ocasiones, se hace un poco grande y pesado.
A primera vista, las imágenes se muestran bastante nítidas en un panel en el que el contraste de colores no se ve afectado por los diferentes ángulos de visión. El brillo es otro de los puntos fuertes y, aunque no disponemos del dato exacto en nits, podemos asegurar que la pantalla adquiere la visualización correcta en la gran parte de las situaciones, incluso en los momentos con exceso de luz solar. Como dato curioso, el Huawei P30 Pro sigue ofreciendo algunos de los gestos típicos de la compañía como la captura y grabación de la pantalla por medio del toque de nudillos. Asimismo, el notch en forma de gota de agua, muy bien utilizado, puede desaparecer con un simple ajuste. El problema es que se pierde demasiado espacio útil de la pantalla aunque, eso sí, se aprovecha dicho espacio para las notificaciones.
La integración de los gestos es otro de los apartados destacados de una pantalla que permite realizar numerosas acciones con bastante sencillez. Para ello, hay que eliminar los botones habituales de Huawei para proceder a una pequeña barra desde la que se puede controlar todo el terminal. Pero, sin duda, una de las mayores curiosidades que incluye este dispositivo tiene que ver tanto con la pantalla como con el sonido. El Huawei P30 Pro sustituye la típica cápsula en la que se localiza el altavoz de las llamadas por un sistema que afecta a todo el panel delantero. Este terminal utiliza la pantalla para generar vibraciones que transmiten el sonido, un sistema realmente innovador que permite acabar con el auricular habitual sin que exista ningún tipo de disección en la cámara frontal.
En general, el Huawei P30 Pro cuenta con una pantalla exquisita en la que el notch en forma de gota de agua es un acierto y donde la tecnología de sonido se muestra como uno de los rasgos más destacados. Un panel con gran capacidad de personalización gracias a EMUI donde podríamos exigir un nivel más de resolución debido al elevado precio del dispositivo.
Rendimiento de gama alta con un procesador de 2018 y un poco más de RAM
Huawei ha decidido mantener el Kirin 980 como pase de potencia para un P30 Pro del que nos esperábamos un poco más. Está claro que este dispositivo puede con todo tipo de aplicaciones sin ningún tipo de problema, pero siempre se exige un poquito más a un móvil premium, ya que se muestra al mundo como un calco del Mate 20 a nivel de rendimiento con algunos aspectos mejorados. Esta estrategia no indica que P30 Pro no se pueda convertir en uno de los terminales más potentes de la actualidad, un terminal realmente fluido en el que la memoria RAM ha pasado de 6 a 8 GB.
Eso sí, si comparamos el último modelo de Kirin con el Qualcomm Snapdragon 855 o el Exynos 9820 del Galaxy S10, la balanza cae de lado de los últimos chipset por pequeñas diferencias. Es en este punto en el que podemos sacar alguna pega de este dispositivo, ya que en lugar de arriesgar con un nuevo procesador, ha decidido optar por el mismo núcleo que incluía en el último gama premium de la marca.
Dicho esto, el Kirin 980 es un gran procesador que corre a una frecuencia de 2,26 GHz y que aporta al P30 Pro exactamente lo que necesita un gama alta de la actualidad: fluidez y rendimiento. Juegos como el Asphalt 9, el PUBG o el Fortnite se disfrutan sin problema en un terminal que en el que no existe muestra alguna de lag y donde destaca la presencia de la tecnología GPU Turbo dedicada especialmente para sacar la mejor experiencia de juego y disminuir la temperatura del dispositivo. Gracias a este plus, la mayoría de los títulos compatibles no bajan de los 60 FPS. Sin olvidarnos de un almacenamiento mínimo de 128 GB que puede llegar hasta los 512 GB y que incluso puede ampliarse con las nuevas tarjetas NM Card de Huawei. Un sistema que no acaba de convencer a los usuarios y que obliga a aquellos que quieran ampliar su memoria a gastar grandes cantidades de dinero en estos componentes.
Software habitual con EMUI 9.1 como base
El máximo exponente de la personalización llega al Huawei P30 Pro por medio EMUI 9.1. La última actualización de la capa está hecha para que los usuarios que quieren alejar su experiencia de la de Android puro. EMUI ofrece una gran cantidad de opciones que amplían un abanico realmente grande en el que cada vez hay más puntos donde elegir. Todo ello con Android 9 Pie como base del sistema operativo e incluyendo todas las tendencias actuales a nivel de software.
En primer lugar, nos hemos encontrado con una navegación bastante intuitiva que puede configurarse a gusto del usuario donde existen una gran cantidad de apps propias que nunca llegan a utilizarse. Incluso se puede personalizar la apariencia general del dispositivo por medio de numerosos temas y fondos de pantallas con los que puede cambiar por completo la estética de interna del terminal. El asistente virtual es otro de los puntos más destacados y la incorporación de la funcionalidad HiTouch con la que poder adquirir productos con solo utilizar la cámara.
Otro de los aspectos que más nos ha sorprendido radica en la integración de un modo oscuro que, en lugar de encontrarse en el apartado de pantalla, se localiza en los ajustes de la batería. Concretamente hablamos de la función “Oscurecer los colores del interfaz” con la que todo adquiere tonos oscuros otorgando una estética muy atractiva al software. Asimismo, está demostrado que el modo oscuro ahorra batería y sirve para aumentar la autonomía, sobre todo en terminales que utilizan pantalla OLED. En general, el rendimiento de la capa no nos ha disgustado en absoluto. Todo funciona bastante bien y no hay rastro de ningún tipo de lag o estancamiento. Lo que está claro es que irán llegando más actualizaciones en las que se incorporarán mejoras y novedades interesantes.
Hola a un lector de huellas en pantalla más rápido y adiós al reconocimiento facial 3D
Está claro que los sensores de huellas en pantalla se encuentran en plena fase de pruebas. Las grandes marcas ya han incorporado a sus terminales una tecnología que aún no está del todo preparada para ofrecer unos resultados tan buenos como los que puede generar un sensor convencional. Sin embargo, tenemos que decir que el lector del Huawei P30 ha mejorado mucho respecto al de los anteriores modelos. Es más, creemos que puede situarse como uno de los mejores lectores de la actualidad por encima de los incluidos en el OnePlus 6T o el Xiaomi Mi 9, y muy igualado con el sensor ultrasónico del Galaxy S10. No obstante, con esto no queremos decir que funcione a las mil maravillas, ya que, en muchas ocasiones, es necesario situar el dedo varias veces sobre la pantalla. Aun así, nada es más rápido que un lector de huellas trasero. Al menos por ahora.
Otro de los aspectos que cambia respecto al Huawei P20 Pro radica en la eliminación del reconocimiento facial 3D. La reducción del notch ha impedido introducir un sistema que ha quedado sustituido por una versión mucho más sencilla que basa su funcionamiento en la cámara delantera del terminal. Eso sí, la seguridad de este tipo de sistemas queda bastante reducida y la identificación facial se complica enormemente en condiciones en las que no hay suficiente luz.
Una cámara muy versátil con el plus del zoom 10x
Hemos repasado todos y cada uno de los puntos importantes del Huawei P30 Pro y nos ha parecido un dispositivo magnífico a nivel de prestaciones y diseño. Sin embargo, siempre hay un punto en el que suelen destacar todos los gama alta, un apartado que se sobrepone al resto que convierte al nuevo terminal de Huawei en un smartphone único. Sí, hablamos de la cámara. El sistema fotográfico del P30 Pro puede definirse como el más completo de la actualidad, un mecanismo fabricado en colaboración con LEICA que es el responsable de generar esas dosis de “adicción” de las que hablábamos al principio del análisis. Eso sí, no todo puede ser perfecto, y hemos conseguido sacar algunos (diminutos) puntos “débiles” de una cámara que llega al mercado para arrasar con la competencia. Así son las cámaras del Huawei P30 Pro:
- Sensor de 40 megapixeles con apertura f/1.6 y estabilización óptica de imagen basado en las lentes SuperSpectrum.
- Sensor de 20 megapixeles ultra gran angular con apertura f/2.2 y lente de 16 milímetros
- Sensor teleobjetivo de 8 megapixeles en formato periscópico con zoom óptico de 5 aumentos, un zoom híbrido de 10 aumentos y uno digital de 50x. Una lente de 125 milímetros con apertura f/3.4 que también incluye estabilización óptica.
- Sensor TOF (Time of Flight) dedicado expresamente para mejorar la profundidad de las fotografías.
La llegada del P20 Pro al mercado se mostró al mundo como una de las auténticas revoluciones a nivel fotográfico. El anterior gama alta de Huawei aún sigue siendo una de las mejores opciones en cuanto a cámara se refiere, sin embargo, la compañía china ha decidido reinventarse con un P30 Pro que llega con cambios importantes. En primer lugar, la compañía china ha decidido incluir una “lente” más a su composición. El sensor TOF se desmarca del módulo tipo semáforo para localizarse unos milímetros más a la derecha acompañando al flash LED. También existe un aumento de megapíxeles en un trio de lentes principales en el que destaca la presencia del sensor teleobjetivo que adquiere una distintiva estética en forma de cuadrado.
Aunque si hablamos de diferencias, el apartado que más destaca en la cámara del P30 Pro además del zoom óptico radica en el cambio de RGB (red-green-blue) a RYYB (red-yellow-blue). Huawei ha decidido acabar con el modo tradicional sustituyendo las tonalidades verdes por las amarillas con una única finalidad: captar el máximo de luz posible. Asimismo, se le añade una capacidad de ISO que alcanza una máxima de 409.600, sin duda, la unión perfecta para realizar las mejores fotografías en condiciones de escasa luminosidad. Aquí es donde entra en escena una mejora importante de parte de la Inteligencia Artificial y la integración de numerosos modos y efectos que conforman una app de cámara realmente versátil.
Las opciones son casi ilimitadas y el modo HDR+ consigue unos resultados magníficos en el que pueden apreciarse algunos toques demasiado artificiales. Esta es una de las únicas pegas que podemos sacar a la cámara del P30 Pro. Hablamos de una tendencia a exagerar la realidad que puede apreciarse, sobre todo, en el modo noche. Sin olvidarnos de la ayuda extra del postprocesado que quizás tarda demasiado en gestionar las fotografías. Eso sí, los resultados cosechados después de este sistema son realmente increíbles.
La aplicación de cámara es muy similar a la que hemos podido ver en modelos anteriores, una herramienta muy intuitiva donde no se aprecian novedades importantes. En este apartado, creemos que Huawei debería haber ubicado el modo HDR de una forma más directa, ya que vuelve a situarse en la pestaña “Más” de la aplicación. En este apartado podemos encontrarnos con otros modos como la panorámica, la cámara lenta, el supermacro o el monocromático.
Una experiencia fotográfica increíble
Utilizar la cámara del Huawei P30 Pro puede convertirse en un hábito completamente adictivo. Durante el tiempo que hemos podido tener el terminal (menos de lo esperado) hemos podido realizar un sinfín de fotografías en las que captar el momento puede definirse como un auténtico goce. Una cámara que recuerda a la del P20 Pro pero en la que se aprecian algunas mejoras importantes entre las que el zoom óptico 5x se muestra como el aspecto más destacado. Esto es a lo que nos referimos:
El zoom óptico del P30 Pro puede conseguir unos resultados impresionantes en buenas condiciones de luz. Una funcionalidad que incluso puede ampliarse hasta los 50 aumentos de forma digital con la que no existen límites longitudinales. Hasta los 10 aumentos las fotografías suelen salir bastante nítidas gracias a la acción de la Inteligencia Artificial y el postprocesado, sin embargo, a medida que vamos subiendo el número todo se vuelve mucho más borroso. En realidad, es bastante lógico y, aun así, pueden conseguirse fotografías bastante correctas cuando se alcanzan rangos con 20x o 30x. Aunque los mejores resultados suelen darse con el zoom óptico 5x.
El modo ultra gran angular tampoco se queda atrás en lo que se refiere a la calidad de imagen. Con un solo toque se puede ampliar la fotografía hasta un ángulo bastante amplio que puede conseguir fotografías como esta:
Está claro que puede apreciarse ciertas deformaciones y diminutas deficiencias en lo que se refiere al color y al contraste en una imagen que parece captada por una cámara réflex profesional. Aunque echamos un poco de menos una mayor inversión en el detalle cuando se realizan fotografías con una buena luz. Los primeros planos son bastante correctos, pero a la hora de ampliar a fotografías de paisajes el resultado no es el mismo.
Un modo noche que impresiona
Cuando el CEO de Huawei realizó las comparaciones entre unos modelos y otros no podíamos creer lo que estábamos viendo. La estrategia de atacar a la competencia es un clásico entre las grandes marcas, pero todo parecía impostado. Al menos eso creíamos, hasta que lo probamos. La nueva reconversión de color utilizada por el P30 Pro unida a un buen trabajo con el ISO han conseguido generar unos resultados realmente espectaculares. En pocas palabras: el P30 Pro saca luz de donde no la hay.
Dar un paseo por París a las dos de la noche para poder fotografiar Notre Dame y encontrarte la catedral con las luces apagadas nos chafó bastante los planes. Luego recordamos que teníamos el P30 Pro y las impresiones entre los compañeros fueron todas similares.
Recuerda que la catedral estaba completamente apagada y no se veía mucho más que el famoso contorno de dicha edificación. Esta clase de sorpresas son las que han convertido al P30 Pro en el móvil con el mejor modo noche del mercado con la excepción del Pixel. La definición de las imágenes es magnífica, aunque suelen pecar de unas altas dosis de artificialidad en algunos casos concretos como se puede apreciar en la galería. Unos resultados cosechados por un sistema de captura que, en nuestra opinión, todavía tarda demasiado en realizar la fotografía, aunque se haya reducido el tiempo.
Ya que hablamos de funciones de la cámara, pueden destacar también un modo retrato que puede identificar las caras de los seres humanos. Se trata de una función que solo se puede utilizar si el software reconoce que lo que tenemos delante es el rostro de una persona. Tranquil@s, suele acertar.
Cámara frontal correcta, buen sonido y vídeo como punto menos bueno
El sensor delantero del Huawei P30 Pro cuenta con una resolución de 32 megapíxeles, una cámara correcta que consigue resultados aceptables en buenas condiciones lumínicas. Eso sí, los colores no son lo esperado y la nitidez de las fotografías se pierde a medida que las condiciones de luz son más reducidas. El modo retrato se activa de forma automática al seleccionar la cámara frontal y cuenta con un modo belleza integrado de por sí que aporta un toque artificial a las fotografías.
En el apartado de vídeo, la mejora es evidente respecto a anteriores modelos. Hablamos de un modo muy versátil con calidad 4K donde se nota el trabajo realizado con la estabilización AIS (Artificial Intelligence Stabilization) y la nitidez. Además, se aprecia un buen resultado con el zoom óptico en buenas condiciones de luz, por la noche no es muy recomendable utilizarlo porque se genera una gran cantidad de ruido.
El sonido nos ha sorprendido bastante, ya que los últimos terminales de Huawei no habían prestado demasiada atención a un apartado que cada vez es más importante para los usuarios. Nos encontramos con un sonido nítido con una calidad aceptable y un volumen que llega hasta unos rangos bastante elevados (112 decibelios). Como curiosidad, merece la pena destacar la presencia de la nueva tecnología de sonido en pantalla de la que hablábamos anteriormente y la eliminación del Jack de auriculares como punto negativo.
Mejoras en la batería con una carga rápida brutal
El Huawei P30 Pro llega al mercado con una batería de 4.200 mAh que, además de hacer el dispositivo más grueso, consigue unos grandes resultados en el apartado de autonomía. Hablamos de unos rangos que se encuentran entre el día y el día y medio de uso con una media que supera las nueve horas en pantalla, lo que supone un avance respecto al Mate 20 Pro. El nuevo terminal de Huawei puede considerarse como uno de esos terminales que te puede llevar a cualquier lugar sin tener que estar preocupado por el cargador. Sí, la batería es uno de sus puntos fuertes.
Sin embargo, la duración del dispositivo a pleno funcionamiento no es el dato más destacado del apartado de autonomía. En este caso nos referimos a una carga super rápida de 40W que consigue cargar el dispositivo en un visto y no visto. Haciendo pruebas, hemos podido determinar que el P30 Pro alcanza el 100% de la batería con poco más de una hora conectado a la corriente. Es más, el porcentaje sube hasta más del 70% en menos de 30 minutos. Asimismo, la activación del modo oscuro, aunque no esté bien situado, puede alargar la batería hasta las 11 horas en pantalla como podemos ver en las capturas.
Nuestra opinión sobre el Huawei P30 Pro
El Huawei P30 Pro es uno de esos móviles de los que cuesta desprenderse. Cuando estuvimos en París ya sabíamos más o menos lo que nos íbamos a encontrar, pero cuando lo pruebas te das cuenta de que no hay muchos terminales que lo igualen en la actualidad. El nuevo gama alta chino puede generar esa “adicción” de la que hablábamos al principio gracias a un sistema fotográfico que se enmarca como el verdadero punto fuente del terminal. Todo ello, acompañado de unas prestaciones muy correctas que generan un todo en uno que tiene todo lo necesario para triunfar en el mercado.
El zoom 10x y el modo noche se muestran como uno de los aspectos más destacados de un P30 Pro con el que da gusto tomar fotografías. Sin olvidarnos de una batería que aguanta lo que le echen sin muchos problemas y que puede durar más de un día y medio a pleno funcionamiento. También destaca la introducción de novedades como el Modo oscuro, el diseño y una carga rápida espectacular también destacan como algunos de los rasgos más impresionantes de un terminal al que no le falta de nada
Sin embargo, no todo puede ser perfecto en este mundo. El Huawei P30 Pro también tiene algunas deficiencias que, por pequeñas que sean, hay que sacar a la luz. Sobre todo si recordamos que este dispositivo eleva su precio para rozar los 1.000 euros. En primer lugar, nos fijamos en un diseño con el que es obligatorio comprar una buena funda, ya que, aunque es bastante atractivo, resbala demasiado. Aunque quizás el peor aspecto radica en la manutención del Kirin 980 y la obligación de adquirir las tarjetas NM Card si queremos ampliar la memoria del smartphone. Sin dejar de lado la presencia de EMUI como capa de personalización y un lector de huellas en pantalla que mejora pero que aún no está al nivel de los sensores traseros.
El Huawei P30 Pro es un móvil que tiene tanta versatilidad y cualidades que sus carencias quedan completamente desterradas en el olvido. Todo se puede mejorar, pero la compañía china ha conseguido crear un dispositivo en el que las posibilidades son casi infinitas. Sin duda, un móvil bastante caro con el que te olvidarás del precio en cuanto pases unos pocos días a su lado.