Ya se acabó la época en la que hablábamos de los móviles Nexus. El pasado 4 de octubre, Google nos dejó claro las intenciones que iba a tener a partir de ahora con su nueva gama de móviles, los Pixel. Estos terminales estarían bajo el eslogan #madebygoogle, olvidándose de la colaboración que tenía años atrás en los Nexus. Estos terminal estarían destinados a estar en lo más alto de la gama alta, superando incluso a los terminales de Samsung o de Apple.
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Tanto el Pixel XL como el normal, llevarían las especificaciones más potentes del mercado, un Qualcomm Snapdragon 821 con 4 GB de memoria RAM. Su cámara, según la página experta en fotografía DxOMark, estaría en el primer puesto, así que ya sabemos cuáles son las intenciones de Google sacando este dispositivo. Su estrategia se basa en emular el sistema que ha hecho Apple con sus iPhone e intentar superarlo.
Ayer pudimos asistir a un evento privado que ha organizado Google para presentarnos los nuevos Pixel XL. En este evento, tenemos que decir, que solo nos han dejado probar 30 minutos el dispositivo, y no en las mejores condiciones. La primera sensación que hemos tenido es que es un móvil grande, y bastante grueso, mucho más que sus competidores, pero que cuando lo tienes en la mano te sientes bastante cómodo.
El problema del diseño es el que hemos comentado ya muchas veces: los marcos son demasiado grandes. En nuestro caso, hemos podido probar la versión de color blanco, que a nuestro parecer, es la menos bonita. Su parte superior es mucho más grueso que la inferior, que, junto con el aluminio de la parte trasera, hace que el agarre mejore y que no se convierta en un dispositivo frágil ni resbaladizo a la mano.
Al empezar a configurarlo ya nos hemos dado cuenta de que esto era un Nexus con un nuevo nombre. La experiencia que hemos tenido desde el principio ha sido de Android nativo, sin complicaciones, ni añadidos. Lo poco que hemos podido probar el móvil nos ha dejado muy buenas sensaciones, ya que era muy fluido, sencillo, simple.
Google ha conseguido que cuando pensemos en sus dispositivos, pensemos en unos móviles que son realmente fluidos. Esa es la experiencia que nos ha dado año tras año con los Nexus, y este Pixel no es para menos. Hemos podido ver los nuevos añadidos del software, como Google Assistant, que solo está en inglés, o el soporte técnico de los Pixel, que es 24 horas.
En el apartado de la cámara, no tuvimos muchas opciones para probarla a fondo, ya que ni teníamos tiempo suficiente ni las condiciones lumínicas eran las adecuadas, pero lo poco que vimos nos gustó mucho. Un gran detalle en cada imagen, sobre todo en el Modo HDR, que nos hace pensar que sí podemos estar delante de la mejor cámara del mercado, pero para confirmar esto tenemos que probarlo a fondo. Un detalle que nos dimos cuenta es su modo para hacer fotos con el efecto «bokeh», que son las que permite a la cámara desenfocar la parte trasera del objeto enfocado. De cuatro veces que lo probamos, tres falló, y era un poco incómodo hacer la foto.
Cuando tengamos el Google Pixel XL, os traeremos un análisis mucho más completo y conciso, pero en estos 30 minutos, hemos tenido muy buenas sensaciones de la nueva apuesta de Google. Tuvimos la ocasión de preguntar cuándo llegaría a España, pero no tenían fecha todavía. Algo que nos hace pensar que todavía queda para su llegada es que el dispositivo todavía estaba en inglés.